Tuve la suerte de disfrutar en mi País este campeonato mundial y poder experimentar así la energía por las calles porteñas, donde una magia celestial nos unió sin importar quienes éramos y adónde íbamos.
Caras iluminadas por la esperanza,
voces entonando una canción, que invita a ser aprendida.
Manos húmedas que buscan un abrazo,
miradas que encuentran que mirar.
En el lienzo, colores flúor encienden sus fibras como las mías. Inspirada estoy. De abuelos a padres e hijos su nombre cantarán. Trasciende el plano de la materialidad. El faraón. Inmortal será.
This painting is made using acrylic and markers. Painted on canvas.